La Red «Comète» por los montes de Baztan-Bidasoa

Marcha conmemorativa por los montes de Baztan por los caminos de la Red Comète

El primer fin de semana de septiembre, amigos y familiares de las personas que participaron y colaboraron con la Red Comète se reunirán nuevamente para honrar y mantener viva su labor y compromiso con la libertad.

El domingo 8 de septiembre, caminarán desde Lauzeta hasta Amaiur, rindiendo un homenaje especial a las personas de los baserris de Kanttorrenekomendia, Mortalenborda y Jaurikoborda en Amaiur y Erratzu.

La marcha, concretamente, seguirá el recorrido que realizaba Xan Mihura llevando a los aviadores hasta el caserío Kanttorreneko mendia, en Amaiur, o Mortalen borda en Erratzu.

Al finalizar este recorrido, a la 13.15 en la plaza de Amaiur, se homenajeará a los descendientes de los caseríos Kanttorrenekomendia, Mortalenborda y Jaurikoborda. Por último, habrá una comida en Venta Peio.

Antes de eso, los días 6 y 7 de septiembre, Les Amies de Réseau Comète celebrarán diversos actos en Iparralde, donde se reunirán personas de diversos países.

Historia

La Red Comète, fundada en 1941 por los belgas Arnold Dedée y Dédée De Jongh, fue una organización dedicada al rescate  de aviadores aliados cuyos aviones eran derribados en su trayecto de ida o vuelta sobre Holanda, Bélgica o Francia en sus incursiones de bombardeo sobre objetivos estratégicos de Alemania y la Europa ocupada. La Red «Comète» rescató durante tres años fugitivos para conducirlos, atravesando la España franquista, hasta Gibraltar; desde donde eran evacuados a Gran Bretaña.

Durante los primeros tiempos, el paso de la frontera se hacía cruzando el río Bidasoa a la altura de Endarlatsa, dirigidos por Florentino Goikoetxea con participación de otros guías en algunos momentos. Tras una denuncias, Dedée De Jongh y sus compañeros fueron detenidos el 15 de enero de 1943 en el caserío Bidegain Berri, en Urrugne, cuando preparaban un paso. Los servicios británicos indicaros a Jean François Nothomb, «Franco», que buscase una ruta alternativa a la del Bidasoa, que será dejada algún tiempo. A su vez, «Franco» encarga a Pierre Elhorga, excombatiente y herido de guerra que vive en el barrio Sutar de Anglet, que busque otros pasos.

Así, Elhorga organiza un nuevo itinerario: la ruta Ustaritz-Larressore-Espelette. Pero este itinerario pronto quedará saturado y Elhorga contacta con Juanito Bidegain, un refugiado de Bera que trabaja en el caserío Seme Enea, de Bassussarry, y que tenía experiencia como guía. Bidegain, establece un nuevo recorrido a partir de diciembre de 1943: Bassussarry-Souraïde. Bidegain conduce a los evadidos desde Bassussarry hasta el caserío Mendigaraya, donde son acogidos por la familia Etxeveste. Para continuar el camino hacia la frontera, Michel Etcheveste era ayudado por su hermano José Mari y por su padre Joseph-Marie, que vigilaba los movimientos de los alemanes desde los montes de Ainhoa.

En la frontera

Tras rodear Ainhoa, y pasar junto a una cantera, los fugitivos llegaban a la regata Lapitxuri, que constituye frontera y que , a pesar de ser de alto riesgo, era fácil de atravesar por su escaso caudal y anchura. Al otro lado se encontraba Mikelen Borda, que en la época era una modesta venta en la que se vendía de todo, desde la que se podían oír los gritos y conversaciones de los centinelas alemanes y españoles. Esta venta era de propiedad de la familia Mújica. Más tarde, Michel Etcheveste recibirá la orden de Bidegain de pasar por Apetxen-Borda, caserío ubicado en la línea fronteriza regentado por la familia Bergara, que era propietaria del caserío Quito Borda, a unos 500 m. en el lado español, desde done probablemente se desplazarían a Zugarramurdi, Etxalar o Urdax.